El camino hacia un sistema energético mundial con cero emisiones netas depende en gran medida de la rápida expansión y adopción de baterías. Según un análisis de BBVA Research, las baterías juegan un papel crucial en la transición energética, impactando significativamente los sectores del transporte y la energía.
Las baterías de iones de litio dominan actualmente el mercado, tanto en vehículos eléctricos como en aplicaciones de almacenamiento de energía, gracias a recientes reducciones de costos y mejoras en su rendimiento. En los últimos tres años, los volúmenes de baterías para vehículos eléctricos se han cuadruplicado, con un notable incremento en los turismos.
China lidera el mercado global de baterías para vehículos eléctricos, controlando el 55% del mercado. Sin embargo, esta participación está disminuyendo gradualmente debido al fortalecimiento de mecanismos de apoyo y regulaciones en otras regiones del mundo.
Para cumplir con los objetivos establecidos en la COP28, el despliegue de baterías debe multiplicarse por seis para 2030. Esto requerirá esfuerzos coordinados entre los responsables políticos y la industria.
La expansión del mercado mundial de baterías no solo es esencial para la transición energética, sino que también presenta nuevas oportunidades para diversificar las cadenas de suministro. Las baterías son vistas como una “llave maestra” capaz de desbloquear importantes transformaciones industriales y generar beneficios económicos sustanciales.