Las peores inundaciones en más de 50 años en España han dejado un saldo devastador de al menos 158 fallecidos, mientras las autoridades continúan con labores de rescate en busca de víctimas en áreas arrasadas por agua y lodo, informó este jueves el servicio de emergencias de Valencia. La región, afectada por lluvias torrenciales entre martes y miércoles, registró 155 decesos, mientras que otros tres fallecieron en Castilla-La Mancha y Andalucía.
El presidente, Pedro Sánchez advirtió que la emergencia continúa y pidió a los habitantes de Valencia permanecer en sus hogares para proteger sus vidas. “El compromiso es con todos los recursos posibles, el tiempo que sea necesario, para encontrar a las personas desaparecidas”, dijo Sánchez durante su visita a las zonas afectadas. La región será declarada zona catastrófica y ya se han destinado 250 millones de euros en ayudas de emergencia.
La tormenta golpeó especialmente a localidades como Paiporta, donde los vecinos han visto devastado su entorno. David Romero, residente de la zona, relató la gravedad de la situación: “No queda comercio en pie… necesitamos ayuda humanitaria con alimentos y agua”. En algunas ciudades, el suministro de agua y electricidad sigue interrumpido, y las carreteras están intransitables por la acumulación de barro, escombros y vehículos arrastrados por el agua.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) detalló que algunas áreas de Valencia recibieron hasta 491 mm de agua en menos de 24 horas, lo equivalente a un año de precipitaciones. Según expertos, fenómenos como la “gota fría” que afecta periódicamente a la costa mediterránea española en otoño, están incrementando en frecuencia e intensidad debido al cambio climático.