Las calles de Puerto Príncipe han sido testigo de enfrentamientos armados después de tres días de relativa calma, mientras continúan las conversaciones para establecer autoridades transitorias en medio de la grave crisis política, de seguridad y humanitaria que afecta al país caribeño.
En la capital, donde las bandas armadas controlan alrededor del 80% de la ciudad, los pandilleros saquearon e incendiaron la residencia del director general de la policía, Frantz Elbé, según informó el sindicato policial Synapoha en la red social X.
Los disparos de armas automáticas, que habían disminuido en los últimos días, se escucharon el miércoles por la noche y la madrugada del jueves en varios barrios de la ciudad, según reportes de periodistas que se encuentran en el lugar.
“He escuchado ráfagas durante toda la noche. No pude dormir. Los disparos sonaban muy cerca”, dijo una residente de Vivy Mitchel, un barrio de Pétion-Ville, en las afueras de Puerto Príncipe, que prefirió mantenerse en el anonimato por motivos de seguridad.
Este jueves también se reportaron disparos cerca del aeropuerto internacional Toussaint Louverture, donde se están llevando a cabo trabajos de reparación en las vallas de seguridad.
La tensión persiste en Haití mientras se espera que se logren avances en las conversaciones para establecer un gobierno transitorio que pueda hacer frente a la crisis multifacética que afecta al país, que incluye la violencia de las pandillas, la inestabilidad política y la precariedad económica.
