Estados Unidos logró evitar este sábado un cierre del gobierno federal que habría afectado a cientos de miles de trabajadores públicos y diversos servicios esenciales, justo antes de las fiestas de Navidad.
El Congreso aprobó una ley que asegura la financiación del Estado federal hasta mediados de marzo, incluyendo más de 100,000 millones de dólares destinados a las regiones afectadas recientemente por desastres naturales.
El Senado dio luz verde al proyecto poco después de la medianoche, hora límite para evitar la parálisis presupuestaria. Aunque el plazo técnico había vencido, la oficina de la Casa Blanca encargada de implementar el cierre decidió no activarlo ante la inminencia del acuerdo en la Cámara Alta.
El líder de la mayoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer calificó la aprobación como “un buen resultado para Estados Unidos y para los estadounidenses”.
El acuerdo final fue alcanzado tras días de negociaciones marcados por la implicación del expresidente Donald Trump y el magnate Elon Musk, quienes inicialmente se opusieron al proyecto presupuestario. A pesar de estas tensiones, el consenso entre demócratas y republicanos fue anunciado el martes por el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson.
Con este nuevo acuerdo, el gobierno federal tiene asegurada su operación hasta marzo, aplazando la discusión sobre el presupuesto a principios del próximo año. Este logro legislativo marca un respiro para la administración saliente y para millones de estadounidenses que dependen de los servicios públicos.