Una operación internacional liderada por la policía española, en coordinación con la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol), resultó en la detención de 20 personas en 12 países, incluidos siete latinoamericanos, por su presunta vinculación con redes de explotación sexual infantil.
La investigación, iniciada a finales de 2024, permitió a agentes especializados infiltrarse en grupos de mensajería instantánea dedicados al intercambio de material de abuso infantil. Según Interpol, las autoridades españolas detuvieron a siete sospechosos, entre ellos un profesional de la salud, acusado de comprar imágenes explícitas a menores de Europa del Este; un docente, por posesión y distribución de pornografía infantil en plataformas digitales.
En América Latina, se realizaron 10 arrestos, destacando tres detenidos en El Salvador y un profesor en Panamá.
Además, hubo capturas en Estados Unidos y otros países de Europa.
Incautaciones e investigaciones en curso
Durante los allanamientos, las autoridades decomisaron computadoras; teléfonos celulares; tabletas y dispositivos de almacenamiento digital.
Interpol confirmó que, además de los arrestos, 68 sospechosos más han sido identificados, y las pesquisas continúan en múltiples países.
La información recabada se compartió con autoridades de 28 naciones en América, Europa, Asia y Oceanía. En diciembre de 2024, investigadores españoles viajaron a Chile para presentar la Operación Víbora en una reunión del Grupo de Trabajo de Identificación de Víctimas de América Latina, coordinando acciones con países como Argentina, Brasil, Costa Rica, El Salvador, Paraguay, entre otros.
Posteriormente, en abril de 2025, la unidad de Crímenes contra Niños de Interpol organizó sesiones de seguimiento para reforzar la colaboración regional.