El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este domingo la imposición de nuevos aranceles del 100% a las películas exhibidas en el país pero producidas en el extranjero, argumentando que la industria cinematográfica estadounidense está siendo “devastada” por la migración de cineastas y estudios a otros países.
A través de su plataforma Truth Social, Trump declaró que autorizó al Departamento de Comercio y al Representante de Comercio de EE.UU. a implementar de inmediato este impuesto, asegurando que Hollywood está “muriendo muy rápidamente” debido a los incentivos que otras naciones ofrecen para atraer producciones.
“Es un esfuerzo concertado de otros países que representa una amenaza para la seguridad nacional”, afirmó el mandatario, quien inició su segundo mandato en enero. Sin embargo, no especificó las condiciones de aplicación ni mencionó si las series de televisión —un sector clave en la industria del entretenimiento— también serán gravadas.
Esta medida marca una nueva escalada en la política comercial agresiva de Trump, quien ha impuesto aranceles a múltiples socios económicos. China, su principal objetivo, ya había respondido en abril reduciendo “moderadamente” la cantidad de películas estadounidenses en sus cines, como represalia por los aranceles de hasta el 145% aplicados por Washington a sus productos.
El mercado chino, el segundo más grande del mundo para Hollywood, opera bajo un sistema de cuotas que limita las producciones extranjeras.
