Canadá inició formalmente este lunes un proceso de disputa comercial ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) en respuesta a los aranceles del 25% impuestos por Estados Unidos a vehículos y autopartes importados, medida implementada por el gobierno del presidente Donald Trump desde el 3 de abril.
La OMC confirmó en su sitio web que Canadá solicitó consultas con Washington bajo el mecanismo de solución de controversias del organismo, primer paso formal en un proceso que podría escalar a un panel arbitral si no se alcanza un acuerdo bilateral. Los aranceles estadounidenses afectan a automóviles fabricados fuera de EU y se extenderán progresivamente a piezas de repuesto.
En reciprocidad, el primer ministro canadiense Mark Carney anunció la imposición de gravámenes del 25% sobre ciertas importaciones de vehículos estadounidenses. “Canadá está actuando para defender los intereses de su sector automotriz y el sistema de comercio multilateral”, señaló un comunicado gubernamental.
Las consultas solicitadas —distribuidas hoy a los 164 miembros de la OMC— otorgan a ambos países 60 días para negociar. De fracasar, Canadá podría pedir la formación de un panel arbitral. Analistas advierten que esta disputa podría tensionar aún más las relaciones comerciales en Norteamérica, particularmente sensibles tras la renegociación del T-MEC en 2020.
