La informalidad laboral sigue siendo un problema persistente en México; según los últimos datos de la ENOE, en noviembre pasado más de 32.8 millones de personas trabajaban en el sector informal, lo que representa el 54.6% de la población ocupada.
Esta situación genera una brecha salarial significativa. Mientras los trabajadores formales perciben un ingreso promedio de 10,584 pesos mensuales, los informales apenas alcanzan los 5,019 pesos. Aunque ambos grupos registraron aumentos en sus ingresos respecto al año anterior, la diferencia sigue siendo considerable.
