China se prepara para un impulso fiscal sin precedentes. El gobierno chino acordó emitir bonos especiales del Tesoro por un valor de 411 mil millones de dólares en 2025, según trascendió. Esta cifra récord busca reactivar una economía golpeada por la crisis inmobiliaria y la desaceleración del consumo.
Los fondos obtenidos se destinarán a impulsar el consumo a través de subsidios y programas que incentiven la compra de bienes y servicios; modernizar empresas financiando mejoras en equipos y tecnología; e
invertir en sectores estratégicos como innovación y fabricación avanzada.
Con esta emisión de bonos, China busca estimular la demanda interna y compensar la posible desaceleración de las exportaciones. Sin embargo, analistas advierten que los consumidores chinos podrían ser reacios a gastar debido a la incertidumbre económica y la caída de los precios de la vivienda.
