Ante los señalamientos recientemente realizados por el Consejo Nacional de la Tortilla (CNT), respecto al actuar de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en cuanto al monitoreo de precios del kilogramo de tortilla, la dependencia informa que este se lleva a cabo con el objetivo de cumplir con
la responsabilidad institucional de brindar información a la población consumidora, a fin de orientarla sobre los establecimientos en donde les conviene adquirir este producto básico, en beneficio de la economía familiar.
Por lo que, indica, no realiza actividades de supervisión, evaluación o inspección a las tortillerías como lo plantea la CNT.
La Procuraduría señala que dicho monitoreo de precios obedece a la instrucción girada por la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, en concordancia con las atribuciones conferidas en la Ley Federal de Protección al Consumidor, pero sobre todo por el mandato del pueblo de México.
La metodología con la que se lleva a cabo el monitoreo está basada en evidencia cuyo marco muestral se establece conforme al Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas (DENUE), emitido por el
Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en relación a la actividad económica 311830 –Elaboración de tortillas de maíz y molienda de nixtamal-, del cual se realiza una selección de los establecimientos para la recolección de precios, atendiendo los criterios de mayor actividad económica, densidad de población y mejor ubicación geográfica, de acuerdo con el Estatuto Orgánico de la Profeco, además de considerar que se trate de un local formal que tenga de uno a cinco trabajadores, con máquina para producir la tortilla así como con instrumentos de medición (báscula) y que venda el producto por kilo.
Es importante precisar que la Profeco no controla precios, pero sí verifica que se respeten los precios máximos establecidos en términos de la Ley Federal de Competencia Económica, así como los precios y tarifas dispuestos por otras disposiciones y determinados por las autoridades competentes.
Por ello, pone a disposición de las y los consumidores la herramienta Quién es Quién en los Precios, con la que se busca empoderarlos para decidir dónde sí y dónde no comprar, en este caso, el kilo de tortilla.