Con tres representantes que se hicieron notar en el Top 10 de sus categorías, la selección mexicana de levantamiento de pesas arrancó a tambor batiente su participación en el Campeonato Mundial de la especialidad, celebrado en Manama, Baréin.
El campechano José Poox, atleta a cargo del entrenador Javier Tamayo, fue el gran protagonista de la jornada al quedarse con el octavo lugar del orbe en los 55 kilogramos, gracias a sus marcas de 105 kilogramos en arranque, 138 kilogramos en el envión y 243 kilogramos en el total.
En la misma división, el neolonés Juan Barco se ubicó en el noveno lugar del total con 222 kilogramos, décimo del envión con 123 kilogramos y décimo primero en el arranque con 99 kilogramos.
Isabel Barco, también de Nuevo León y especialista en los 45 kilogramos, registró 63 kilogramos en el arranque, 82 kilogramos en el envión y 145 kilogramos en el total, marcas que la posicionaron en el décimo peldaño.
El representativo azteca regresará este sábado a la tarima mundialista con Víctor Güémez en el Grupo C de los 67 kilogramos, Andrea De La Herrán en el Grupo A de los 49 kilogramos y Vicente Montoya en el Grupo C de los 73 kilogramos.