La agencia calificadora de riesgo. Moody’s anunció un cambio en la perspectiva de la calificación de crédito de México, pasando de “estable” a “negativa”. Si bien, la calificación crediticia en sí misma se mantiene en “Baa2”, esta modificación refleja las crecientes preocupaciones de la agencia sobre la situación fiscal y el entorno institucional del país.
Una perspectiva negativa indica que existe una mayor probabilidad de que la calificación crediticia de México sea rebajada en el futuro. Esto podría tener diversas implicaciones, como un aumento en los costos de financiamiento para el gobierno y el sector privado, así como una menor confianza de los inversionistas extranjeros.
Esta decisión de Moody’s refleja una creciente preocupación de los mercados internacionales sobre la sostenibilidad de las políticas económicas del gobierno mexicano. Un deterioro de la calificación crediticia podría tener un impacto negativo en la inversión extranjera directa, el crecimiento económico y el peso mexicano.
ara revertir esta tendencia negativa, el gobierno mexicano deberá implementar medidas que fortalezcan las finanzas públicas, reduzcan la deuda, aumenten la transparencia y garanticen la independencia de las instituciones. Además, será fundamental impulsar reformas estructurales que promuevan el crecimiento económico a largo plazo.