La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) realizó el miércoles su primer recorte de tasas de interés desde 2020, reduciendo su tasa de referencia en 50 puntos básicos, dejándola entre 4.75% y 5%. Esta medida, que busca controlar la inflación y apoyar el crecimiento económico, refleja un cambio en la política monetaria del banco central, que ha estado lidiando con presiones inflacionarias.
El comunicado de la Fed destaca su “mayor confianza” en una reducción sostenida de la inflación, y señala la posibilidad de otro recorte de medio punto porcentual antes de fin de año. Sin embargo, la decisión no fue unánime.
La Fed también ajustó su proyección de inflación a la baja, situándola en 2.3% para el cierre de 2023 y en 2.1% para 2025. Se espera que la meta de inflación sea del 2%, considerada adecuada para la estabilidad económica.
Por otro lado, el banco central revisó alza en sus expectativas de desempleo, anticipando un nivel del 4.4% en 2024. En cuanto al crecimiento económico, la Fed espera que el Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos aumente un 2% en 2024, una ligera disminución frente al 2.1% proyectado anteriormente.