El fabricante estadounidense Tupperware, famoso por sus icónicos recipientes de plástico, solicitó protección bajo el Capítulo 11 de la ley de Quiebras en Estados Unidos, en medio de dificultades financieras que han afectado a la empresa durante años y una caída en la popularidad de sus productos.
Laurie Ann Goldman, presidenta de la compañía, explicó que la situación financiera de Tupperware se ha visto comprometida por un entorno macroeconómico adverso. “Hemos explorado varias opciones estratégicas y hemos estimado que acogernos a esta ley era la mejor salida”, señaló.
El Capítulo 11 permite a las empresas seguir operando mientras buscan recuperarse financieramente. La cotización de las acciones de Tupperware fue suspendida en la Bolsa de Nueva York después de que Bloomberg informara sobre la posible quiebra. Un día antes, las acciones cayeron un 57.51% en una sola jornada.
El grupo ya había advertido a mediados de agosto que enfrentaba problemas de liquidez graves y que había “dudas sobre su capacidad de continuar con su actividad”.
