Luego de 15 días de la captura de Ismael “El Mayo” Zambada y Joaquín Guzmán López, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, negó en una conferencia de prensa que su país haya proporcionado recursos o agentes para la operación que resultó en la detención de ambos capos.
Salazar afirmó que Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, se entregó voluntariamente, mientras que “El Mayo” Zambada fue trasladado a Estados Unidos contra su voluntad.
“No fue un avión de los Estados Unidos, no fue un piloto de los Estados Unidos, no fueron nuestros agentes”, aclaró el diplomático estadounidense, subrayando que la operación fue llevada a cabo por los propios cárteles.
El embajador detalló que el vuelo en el que viajaron Guzmán López y Zambada partió de Sinaloa y llegó a Santa Teresa, en Nuevo México. Salazar expresó sorpresa al enterarse de la operación, y destacó que su país mantuvo contacto inmediato con el gobierno mexicano para coordinar la respuesta.
En cuanto al piloto del avión, Salazar enfatizó que no es empleado del gobierno de Estados Unidos ni ciudadano estadounidense. “Lo que sí sabemos es que Joaquín Guzmán se entregó, y con él venía el pasajero [Zambada]”, dijo Salazar, añadiendo que Estados Unidos ha compartido la evidencia disponible con las autoridades mexicanas.
El embajador también resaltó la cooperación entre ambos países, mencionando que visitó El Paso junto a una delegación especial enviada por la Fiscalía de Estados Unidos para revisar la evidencia relacionada con el caso. “Esto demuestra la colaboración que tenemos con México, algo que no ocurría antes”, señaló.
Salazar reiteró el compromiso de Estados Unidos en continuar compartiendo información con el gobierno mexicano, subrayando la importancia de esta colaboración en la lucha contra el narcotráfico.
