La Corte Suprema de Estados Unidos afirmó que la mifepristona, píldora utilizada en la mayoría de los abortos en el país, anuló las restricciones impuestas por un tribunal inferior al acceso de ese medicamento, debido a que los médicos y grupos antiabortistas que impugnaban el medicamento carecían de legitimación para presentar el caso.
Ante ello, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, señaló que la “lucha” por el derecho al aborto sigue a pesar de la sentencia de Corte Suprema.
“La decisión de hoy no cambia el hecho de que la lucha por la libertad reproductiva continúa”, afirmó el mandatario estadounidense.
“Seamos claros: los ataques al aborto con medicamentos son parte de la agenda extrema y peligrosa de los electos republicanos para prohibir el aborto en todo el país. Desde la revocación de Roe contra Wade, los republicanos han impuesto prohibiciones extremas del aborto en 21 estados, algunos de los cuales no incluyen excepciones por violación o incesto”, dijo.