El presidente ruso, Vladimir Putin, prometió “castigar” a los responsables del atentado que dejó la víspera al menos 133 muertos en Moscú y aseguró que los presuntos autores fueron detenidos cuando huían hacia Ucrania, sin mencionar la reivindicación del grupo Estado Islámico (EI).
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski,ñ acusó a Putin de intentar “echar la culpa” en Ucrania, que lleva dos años luchando contra la ofensiva rusa.
“Vienen a Ucrania, queman nuestras ciudades e intentan culpar a Ucrania. Torturan y violan a nuestra gente y les echan la culpa. Trajeron a cientos de millas de sus propios terroristas aquí, a suelo ucraniano (…) y no se preocupan de lo que ocurre en su propio país”, declaró Zelenski, cuyo país enfrenta desde hace más de dos años una invasión rusa.
El EI reivindicó el viernes el ataque contra la sala de conciertos Crocus City Hall en la periferia de Moscú, afirmando que “fue conducido por cuatro combatientes” en el contexto de “la guerra” contra “los países que combaten el islam”.
Ese atentado, cometido antes de un recital del grupo de rock ruso Piknik, es el más sangriento en Rusia desde hace dos décadas y el más letal cometido en Europa por la organización yihadista.
Putin calificó el drama de “acto terrorista salvaje”, prometió castigar a todos los responsables y decretó este domingo como día de luto nacional.