El Vaticano informó este lunes que el fallecimiento del Papa Francisco se debió a un ictus que le provocó un estado de coma e insuficiencia cardiocirculatoria irreversible, según consta en su certificado de defunción, difundido oficialmente por la Santa Sede.
El documento, firmado por el profesor Andrea Arcangeli, director del Departamento de Salud e Higiene del Vaticano, detalla que “la muerte fue constatada por registro electrocardioterapéutico”. La declaración oficial pone fin a las especulaciones sobre las causas del deceso del pontífice, quien lideró la Iglesia católica durante más de una década.
El Papa Francisco, de 88 años, fue una figura clave en la modernización de la Iglesia y en la promoción de reformas pastorales. Su muerte ha conmocionado a millones de fieles alrededor del mundo, y se espera que en los próximos días se anuncien los preparativos para su funeral y el proceso de sucesión.
Mientras las condolencias llegan desde todos los rincones del planeta, el Vaticano declaró un periodo de luto oficial, invitando a la comunidad católica a orar por el eterno descanso del Sumo Pontífice.