La inflación en México cerró el 2024 con una tasa anual de 4.21%, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Esta cifra se ubicó por debajo de las expectativas de los analistas, lo que representa una buena noticia para la economía nacional.
El Banco de México implementó una serie de medidas para controlar la inflación, y los resultados obtenidos hasta el momento son alentadores. Sin embargo, las autoridades monetarias continuarán vigilando de cerca la evolución de los precios y se mantendrán dispuestas a ajustar su política monetaria si fuera necesario.
Por su parte, la inflación subyacente en México, que excluye los productos más volátiles como alimentos y energéticos, cerró el año en 3.65%. Este indicador es considerado un mejor parámetro para medir las tendencias inflacionarias a mediano plazo, y su disminución refleja una mayor estabilidad en los precios.
