El papa Francisco confesó haber sido objetivo de dos intentos de atentado durante su histórica visita a Irak en marzo de 2021, según extractos de su autobiografía titulada Esperanza , Corriere Della Sera.
De acuerdo con el relato del pontífice, la policía vaticana recibió información de los servicios secretos británicos sobre una posible amenaza: una mujer suicida cargada de explosivos fue detectada en Mosul con la intención de atentar durante su visita. “La policía había alertado a la gendarmería vaticana sobre un kamikaze que se dirigía a Mosul para inmolarse”, relató.
A esta amenaza se sumó otro intento: “También se lanzó una furgoneta a toda velocidad con la misma intención”, detalló el papa en su autobiografía. Ambos atentados fueron frustrados por las fuerzas de seguridad iraquíes, quienes interceptaron y abatieron tanto a la mujer como al conductor del vehículo.
El papa Francisco, que celebra su cumpleaños número 88 este martes, reconoce en su libro que muchos le desaconsejaron realizar el viaje debido a los riesgos evidentes en un país donde las células yihadistas mantenían una actividad significativa. Sin embargo, aseguró que sintió un fuerte llamado a llevar a cabo esa misión: “Quería llegar al fondo, sentí que tenía que hacerlo”.
La visita, que tuvo lugar del 5 al 8 de marzo de 2021, fue la primera de un pontífice a Irak y estuvo marcada por medidas estrictas de seguridad. Durante esos tres días, el papá recorrió ciudades como Bagdad, Mosul y Qaraqosh, en el norte del país, una región históricamente afectada por la violencia yihadista.