El Congreso estadounidense enfrenta una carrera contra el tiempo este viernes para alcanzar un acuerdo presupuestario que evite el cierre de servicios federales, conocido como Shuttle.
El debate presupuestario refleja las divisiones persistentes entre demócratas y republicanos, que intentan encontrar un equilibrio entre las demandas de sus respectivas bases y las exigencias de un presupuesto.
Ante la falta de tiempo para finalizar un presupuesto general para 2025, legisladores de ambos partidos consideran la posibilidad de aprobar una resolución temporal.
De no lograrse un acuerdo, un cierre afectaría gravemente la vida cotidiana de millones de personas. Desde el congelamiento de beneficios sociales hasta la suspensión de servicios esenciales, las consecuencias económicas y sociales serán significativas, además de generar incertidumbre política.
El impasse presupuestario refleja las divisiones entre demócratas y republicanos, quienes intentan conciliar sus prioridades partidarias en un escenario de negociación.
Con el reloj avanzando, el Congreso tiene poco margen de error para evitar un cierre que podría empañar las festividades y tener repercusiones políticas.