El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol evitó este sábado una moción para destituirle tras el boicot de los diputados de su partido, el Partido del Poder Popular (PPP), que abandonó en la Asamblea Nacional, condenando al fracaso la propuesta de la oposición.
La moción de destitución fue impulsada tras la declaración sorpresiva de ley marcial por parte de Yoon el martes, una medida que incluyó el envío de tropas al parlamento y que fue revocada horas después debido al rechazo generalizado de los diputados.
Para aprobar la moción, los partidos de oposición necesitaban una mayoría de dos tercios, pero el boicot del PPP impidió que se alcanzara el quórum necesario. “El número de miembros que votaron no alcanzó la mayoría requerida”, informó Woo Won-shik, presidente del parlamento, declarando inválido el resultado.
La decisión de Yoon, de declarar la ley marcial desató críticas por considerar una amenaza a la democracia, intensificando las tensiones entre el gobierno y la oposición. Si bien el PPP logró bloquear la destitución, el incidente generó cuestionamientos sobre la estabilidad política del país y la gestión