El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu lanzó este martes una severa advertencia a los ciudadanos libaneses, instándolos a liberar a su país del grupo islamista Hezbolá, bajo amenaza de una “destrucción” comparable a la sufrida por Gaza. En un video en inglés, Netanyahu afirmó que el conflicto podría terminar si Líbano expulsa al movimiento proiraní, sugiriendo que la ofensiva israelí, que ya ha devastado Gaza, podría replicarse en Líbano.
Esta amenaza surge mientras Israel intensifica su ofensiva terrestre en el sur de Líbano, donde se enfrenta a Hezbolá, grupo al que acusa de lanzar constantes ataques desde el norte, en paralelo a las hostilidades con Hamás en Gaza. Netanyahu también recordó la reciente eliminación de Hasán Nasralá, líder de Hezbolá, y prometió eliminar a sus sucesores si persisten las agresiones.
Por su parte, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant aseguró que Hezbolá se encuentra debilitado por los ataques aéreos israelíes. Sin embargo, a pesar de los golpes recibidos tanto por Hezbolá como por Hamás, ambos grupos continúan lanzando cohetes contra Israel, desafiando la ofensiva.
El ejército israelí, que desde el 30 de septiembre ha desplegado cuatro divisiones en el sur del Líbano, anunció el inicio de “operaciones limitadas” contra infraestructuras de Hezbolá. Las 0 del sur de Líbano y los suburbios del sur de Beirut, bastiones de este grupo, siguen siendo objetivo de intensos bombardeos.
En respuesta, Hezbolá reivindicó el lanzamiento de cohetes contra posiciones israelíes, mientras su número dos, Naim Qasem, declaró que el movimiento sigue “perfectamente organizado” y mantiene su capacidad.
