La actividad industrial en China registró una contracción en agosto por cuarto mes consecutivo, según datos oficiales divulgados este sábado, lo que subraya las crecientes dificultades económicas que enfrenta la segunda mayor economía del mundo.
El índice de gestores de compras (PMI), un indicador clave de la producción industrial, se situó en 49.1 puntos en agosto, de acuerdo con la Oficina Nacional de Estadística de China. Esta cifra representa una contracción mayor que la registrada en julio, cuando el índice se ubicó en 49.4 unidades. En este indicador, cualquier cifra inferior a 50 puntos señala una contracción en la actividad económica.
La economía china se enfrenta a varios desafíos simultáneos, incluida una prolongada crisis en su sector inmobiliario, que ha debilitado la confianza de los hogares y las empresas, afectando negativamente el consumo interno. Además, las crecientes tensiones geopolíticas con Estados Unidos y la Unión Europea han impactado en el comercio exterior del país, sumando presión a la ya frágil situación económica.
Este nuevo descenso en la actividad industrial refleja la situación que atraviesa China y plantea dudas sobre la recuperación económica del país en el corto plazo.