Un fallo informático sin precedentes causó el viernes interrupciones significativas a nivel mundial, afectando a aerolíneas internacionales, compañías ferroviarias, bancos, hospitales y empresas de telecomunicaciones. La avería fue provocada por una actualización defectuosa en los sistemas operativos Windows de Microsoft, relacionada con un programa antivirus del grupo estadounidense de ciberseguridad CrowdStrike Falcon. La compañía descartó la posibilidad de un ciberataque o un problema de seguridad informática.
Las acciones de CrowdStrike y Microsoft se vieron afectadas en la bolsa de Nueva York, con caídas del 8.80% y 0.42%, respectivamente, hacia las 16H15 GMT.
“Me gustaría pedir disculpas personalmente a todas las organizaciones, grupos e individuos que se han visto afectados por esta interrupción”, declaró George Kurtz, director general de CrowdStrike, en una entrevista con la cadena estadounidense CNBC.
Microsoft también reconoció el problema, indicando que causaba que las pantallas de los dispositivos afectados se volvieran azules. “Recomendamos a los clientes que sigan los consejos proporcionados por CrowdStrike para solucionar esta situación”, añadió el gigante informático.