La Comisión de Justicia Partidaria y la Comisión Permanente del Partido Revolucionario Institucional (PRI) determinó de manera unánime expulsar al ex gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, por traición al partido.
Luego de que la actual gobernadora Delfina Gómez ganara en el pasado proceso electoral, se le acusó al ex mandatario entregar la entidad a Morena.
Por su parte, en sus redes sociales, Del mazo publicó su postura sobre las acusaciones de las que fue objeto. “No era mi voluntad manifestarme, pero ante la provocación, con mucho pesar he decido renunciar a toda una vida de militancia en el partido”.
Señaló que se vio obligado a renunciar ante un PRI que ha perdido el rumbo y que ya nо representa los principios y valores que dieron origen, vida e historia al partido.
Puntualizó que con esta dirigencia se han olvidado de las causas sociales para poner por encima los intereses personales, se han tenido resultados mediocres, que divide a la militancia y que traiciona los principios del partido mismo.
“Alejandro Moreno, con sus hechos, ha demostrado ser alguien nada confiable, un mentiroso, cínico y traidor. Es un personaje nocivo y ha perdido toda calidad moral dentro y fuera del partido” aseguró, “se está quedado solo, abandonado y se ha convertido en el enterrador del PRI”.
Comentó que no es necesario que él quiera excluir gente del PRI, “su PRI” ya que no representa ni a él ni a millones de mexicanos.
Por último, agradeció a los priistas, en especial a los priistas del Estado de México, por permitir “servirles y trabajar juntos por el bienestar de las familias mexiquenses. Seguiré con la misma convicción y compromiso de seguir trabajando por un mejor Estado de México y un mejor país”.
