En el marco de su campaña presidencial, Xóchitl Gálvez, candidata de la alianza opositora, aseguró que, de resultar electa, su gobierno respetará la división de poderes y no utilizará al Congreso de la Unión para destruir a las instituciones del país. En contraste con lo que calificó como el “Plan C” propuesto por Morena y su candidata, Claudia Sheinbaum, Gálvez presentó su “Plan X” para fortalecer a las instituciones y poner fin al presidencialismo.
Durante la presentación de su proyecto en materia de infraestructura en Boca del Río, Veracruz, la candidata de la coalición Fuerza y Corazón por México destacó su respeto por la autonomía de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), así como por los organismos autónomos como el INAI, el IFT y la Cofece, que considera fundamentales para la transparencia y el rumbo del país, y que, según ella, se encuentran amenazados por Morena.
El Plan X de Gálvez propone establecer un gobierno de coalición que reúna a los mejores perfiles sin importar su filiación político-partidista. Subrayó que su plan gobierna para todos, acabando con el presidencialismo y asegurando la inclusión de todas las visiones sociales.
Enfatizó su compromiso con la reconciliación nacional, afirmando que México necesita superar el odio y la división. Aseguró que una vez en el Congreso, incluso los diputados de Morena votarán a favor de muchas de sus propuestas.
Gálvez concluyó expresando su convicción en el Plan X, que representa la unión de dos líneas con un centro, y reiteró su compromiso de gobernar con los mejores perfiles, buscando la unidad y la reconciliación en el país.