Durante los meses de la Cuaresma, los productores pesqueros y acuícolas de México experimentan un aumento significativo en la producción, generando aproximadamente el 26% del total anual del sector, equivalente a alrededor de 505,899 toneladas. Este incremento se debe en gran medida al aumento en la demanda de pescados y mariscos durante este periodo, que va de febrero a abril.
En este lapso, se destaca el aumento en la captura de especies como almeja, atún, bandera, bonito, camarón, cazón, charal, cintilla, corvina, huachinango, jaiba, jurel, lebrancha, lisa, mojarra, pargo, pulpo, raya, robalo, ronco, sierra, tiburón y trucha, las cuales en conjunto oscilan entre 155,000 y 123,000 toneladas. Entre estas especies, el atún, la mojarra (tilapia), el camarón y el tiburón representan las de mayor volumen de captura.
Según el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), en la temporada de Cuaresma del año pasado, el volumen de productos pesqueros en marzo fue un 40.8% superior al mes de febrero, y en abril, un 3.3% más alto. Esto sugiere una tendencia al alza en la producción durante estos meses.
Además, en los últimos cinco años, estados como Sonora, Sinaloa, Baja California y Baja California Sur han generado más del 76% del volumen nacional de capturas de especies de importancia comercial, tanto para consumo interno como de exportación. Dentro de las 50 especies comerciales más representativas del país, la sardina, camarón, anchoveta, atún y mojarra destacaron como las de mayor volumen de producción.
La oferta de pescados y mariscos está ampliamente disponible en centrales de abasto, tiendas de autoservicio, mercados y tianguis, lo que permite a la población mexicana disfrutar de una variedad gastronómica basada en pescados, crustáceos y moluscos como almeja, mojarra (tilapia), huachinango, sierra, camarón, charal, pulpo, albacora y róbalo.
Precios accesibles y nutrición completa
Durante las primeras tres semanas de la Cuaresma de 2024, los precios promedio de pescados y mariscos oscilaron entre 15 y 30 pesos por kilogramo, lo que los hace accesibles para todos los presupuestos. Entre los pescados más comunes en este periodo se encuentran la lisa chica, lebrancha, jurel chico, charal, lucero chico, ratón, ronco, cojinuda, pluma chica, lisa grande, gurrubata chica, boquilla, albacora, palometa, bobo, chabela, cocinero, tolete, chihuil, aleta de raya, bacoco, sargo chico y albacora grande del pacífico.
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural resalta que el consumo regular de alimentos pesqueros y acuícolas es de gran importancia para la salud, ya que representan uno de los grupos más saludables, completos y disponibles para la población mexicana. El pescado contiene proteínas de alta calidad, ácidos grasos Omega-3, minerales como el calcio, hierro, yodo, zinc y fósforo, así como vitaminas A, D y E, y del grupo
