En respuesta a la declaración del embajador Ken Salazar, donde acepta que el 70 por ciento de las armas que se utilizan en delitos violentos cometidos en México provienen de Estados Unidos, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció la actitud de respeto y de “interés sincero en que encontremos juntos salidas”.
“Esto que reconoció ayer Ken Salazar es importantísimo, ya lo hemos dicho, lo podemos probar, que el 70 por ciento, cuando menos, de las armas que se introducen a México son de origen estadounidense porque no hay control de nada sobre las armas, pero que lo diga él es un acto de sinceridad y de deseos que esto se atienda, antes no se hablaba de eso”, dijo.
Mencionó que actualmente hay un trabajo de cooperación entre ambas naciones para enfrentar el flagelo de la violencia.
El presidente López Obrador aprovechó para recordar que durante el sexenio de Felipe Calderón, miles de armas ingresaron a México con el operativo Rápido y Furioso,
“Con el gobierno de Calderón daban 400 millones de dólares al año y todo en armamento, helicópteros artillados, armas, esa era la cooperación, cuando Rápido y Furioso fue introducir armas de contrabando, un acuerdo entre gobiernos. Armas que traían sensores, fíjense las eminencias que planeaban en política o en materia de seguridad en los dos países en aquel entonces”, expresó.
