Para evitar exponer la privacidad de su familia, la cantante colombiana Shakira llegó a un acuerdo con los fiscales de España para poner fin a su juicio por fraude fiscal en el país europeo.
Esta mañana se presentó a la Audiencia de Barcelona, vistiendo un traje rosa y unas grandes gafas de sol, y aceptó que reconocía su culpabilidad y aceptaba las penas impuestas por fraude fiscal, con ello se comprometerse a pagar una multa de más de siete millones de euros y tres años de prisión, que quedará en suspenso por el pago de otra sanción económica.
“Quiero enfocarme en las cosas que amo – mis hijos, mi próxima gira mundial y mi nuevo álbum”, publicó la cantante en redes sociales.