La líder de la oposición en Venezuela, María Corina Machado, fue detenida este jueves después de encabezar una protesta contra la investidura del presidente Nicolás Maduro, prevista para el viernes.
Vestida de blanco, con una bandera y sobre un camión, Machado, de 57 años, reapareció luego de su última presentación en público el 28 de agosto, un mes después de las elecciones que la oposición asegura que Maduro le “robó” a su candidato, Edmundo González Urrutia.
Una fuente cercana a la dirigente informó sobre su arresto, ocurrido poco después de que saliera en moto de una manifestación en el barrio comercial Chacao, en Caracas, donde centenares de opositores se congregaron.
Minutos antes de su detención, su equipo político denunció en la red social X que Machado “fue violentamente interceptada a su salida de la concentración”. Según el mensaje, efectivos “dispararon contra las motos que la trasladaban”, aunque no ofrecieron mayores detalles.
“Si a mí me pasa algo, la instrucción es muy clara (…), nadie va a negociar la libertad de Venezuela por mi libertad”, declaró Machado.
González Urrutia exigió en X su “liberación inmediata” y advirtió a los cuerpos de seguridad que la retuvieron: “No jueguen con fuego”. Desde el gobierno español también expresaron su “total condena” a la detención.
Sin embargo, el ministro del Interior de Venezuela, Diosdado Cabello desmintió la versión de la oposición y calificó la denuncia como “un invento, una mentira”. Durante una marcha del chavismo transmitida por el canal estatal VTV, afirmó que “querían alarmar a toda Venezuela y al final terminan con la ridiculez de las ridiculeces, mintiendo, diciendo que el gobierno había capturado a María Corina”.
Estados Unidos reaccionó rápidamente, exigiendo que “se respete el derecho de María Corina Machado a hablar libremente” en Venezuela, después de que, según su equipo, la opositora fuera “retenida por la fuerza” antes de ser liberada, según un portavoz de la Casa Blanca.
