El agua no será mercancía en Iztapalapa ni un privilegio ni concesión para algunos, advierte la Alcaldesa Aleida Alavez Ruiz, al dejar en claro que el recurso hídrico es vida y dignidad.
“En nuestra Alcaldía se reconoce como derecho el acceso al agua y su saneamiento”, señaló al instalar, acompañada de funcionarios de su Gobierno, los Comités de Acceso Equitativo al Agua en las 13 Direcciones Territoriales.
Explicó que se trata de un acto de resistencia y de esperanza, en el que todos están involucrados.
Comentó que niñas, niños y adolescentes tendrán un papel fundamental, como guardianes de agua, ya que serán promotores de la cultura del cuidado del agua en la alcaldía.
A los integrantes de los comités del Agua por el Buen Vivir, les dijo:
“En sus manos estará la vigilancia de la distribución de este recurso. Ustedes serán quienes aseguren que el agua llegue a cada hogar, a cada persona que la necesita. ¡No permitiremos más abusos ni especulación con lo que es nuestro por derecho!”.
Detalló que este derecho está vinculado a todos los demás, de modo que si no hay agua, tampoco hay educación, salud, o vida digna.
En ese contexto, la mandataria iztapalapense remarcó que su administración no permitirá que los especuladores jueguen con la vida de la gente, “y ustedes, integrantes de estos Comités, serán la primera línea de defensa; su labor será esencial, porque el acceso equitativo, y la exigencia de justicia hídrica estarán en sus manos. ¡No permitiremos más abusos!”, expresó.
Recordó que la Constitución Política, en su artículo 4º reconoce que toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento de agua para consumo personal y doméstico de manera suficiente, salubre, aceptable y asequible, “y eso es lo que haremos cumplir”, subrayó.
Ante vecinas y vecinos de las 13 Territoriales de la demarcación, señaló que la instalación de estos comités significan un paso firme hacia la protección de este derecho, no como un acto simbólico, sino uno de transformación.
“Estos Comités no sólo vigilarán el cumplimiento de la distribución justa del agua, también serán un espacio de diálogo, de participación activa, de exigencia, porque si algo hemos aprendido, es que sin la participación ciudadana no podemos garantizar el derecho humano al agua”, acotó.
Puntualizó que la ciudadanía activa es clave para garantizar el derecho al agua, “porque solo trabajando juntas y juntos podremos construir un sistema de distribución justo, transparente y eficiente; un sistema donde no haya espacio para la corrupción ni la especulación, donde el agua regrese a quienes siempre les ha pertenecido: al pueblo de Iztapalapa”.
