Shakira publicó en el diario español El Mundo una carta firmada por ella en la que da a conocer su versión sobre la situación judicial que mantuvo con la Agencia Tributaria de España.
“En este pequeño artículo hay más verdad sobre mí que en todo lo que se publicó en 2023”, comentó la cantante colombiana, defendiendo su inocencia y afirmando que admitió su culpabilidad en 2023 por sus hijos, “no por cobardía ni por culpabilidad”.
Shakira relata en su carta una historia que el público siguió por los periódicos y que comenzó en el año 2011, cuando, en pareja con el futbolista Gerard Piqué, ella viajaba regularmente a España. Según su relato, no lo hacía para radicarse en el país —como posteriormente dijo Hacienda— sino más bien con el objetivo de que prosperara su relación amorosa, “Hay un machismo estructural que da por descontado que una mujer solo puede seguir a un hombre, incluso cuando no le conviene”, ya que dijo, eso no hubiera sucedido en caso de ser hombre.
Hay que recordar que en enero de 2018, la Agencia Tributaria la denunció, argumentando que entre 2012 y 2014 la cantante residía en España y, por esa razón tenía que tributar en el país la mayor parte de sus ingresos generados en todo el mundo. En 2023, la artista llegó a un acuerdo que implicó admitir el delito ante un juez y pagar una multa de más de 7 millones de euros (unos US$ 7,9 millones).
Shakira, en el documento publicado, afirmó que la Agencia Tributaria intentó instalar un relato “infantil y moralista” en el que ella evitaba cumplir con sus obligaciones fiscales, pero ella aseguró que siempre cumplió con sus obligaciones y que sus finanzas fueron incluso investigadas por otras instituciones internacionales que nunca encontraron rastro de ilegalidad.
Asimismo, la cantautora señaló a un director general de inspección del organismo de acusarla en un programa de la televisión antes del juicio. “¿Acaso se puede confiar que una institución va a respetar nuestra presunción de inocencia cuando nos condena públicamente antes de la sentencia?”, se preguntó.
“Las cosas no se solucionan quemando en la hoguera a una figura pública al año, como si se tratara de un proceso de la Inquisición para así recuperar el prestigio perdido”, afirma la artista.
La cantante explica que, durante la década que vivió en España, pese a haber brindado 120 conciertos en todo el mundo, no obtuvo ganancias, debido a que el Estado español se quedó con todo lo que ganó en esos años. “Hoy mi patrimonio consiste en lo que gané antes de llegar a España y lo que gané después de salir de ella”.
Puntualizó que ha decidido hablar ahora a través de esa publicación y “El primer motivo son mis hijos”.
“Quiero dejarles el legado de una mujer que expuso sus razones con calma y en sus propios tiempos, cuando ella lo consideró necesario, no cuando la obligaron a hacerlo. Necesito que sepan que tomé las decisiones que tomé para protegerles, para estar a su lado y seguir con mi vida. No por cobardía ni por culpabilidad”, senaló, “la cuento para vivir”.
