El panorama económico de México presenta signos mixtos. A pesar de un notable aumento en el consumo y la inversión fija bruta en marzo, el entorno de incertidumbre persiste, según advierte la iniciativa privada del país. El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) ha lanzado señales de alarma debido a la debilidad de variables clave como la confianza empresarial y del consumidor en mayo.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) reportó un crecimiento económico del 0.3% en el primer trimestre del año, superando ligeramente la estimación inicial del 0.2%. Este crecimiento podría estar impulsado por el periodo vacacional de Semana Santa. Además, el consumo privado en el mercado interno mostró un incremento mensual del 0.8%, superando significativamente la estimación oportuna del 0.2%. En términos anuales, este aumento fue del 5.9%, el mayor desde enero de 2023.
La inversión fija bruta también experimentó una modesta mejoría en marzo, con un incremento mensual del 0.8%, su mejor desempeño en cinco meses. Este repunte se debió principalmente a un aumento del 1.3% en la inversión en construcción, que venía de dos meses consecutivos de bajas. La inversión en maquinaria y equipo aumentó un 0.5%, aunque este crecimiento fue menor comparado con el 2.9% del mes anterior.
La inflación registró un incremento del 4.69%, marcando tres meses consecutivos de alza. El CEESP destacó que esta tendencia refleja un repunte en la inflación no subyacente, que en mayo fue del 6.19% anual, su mayor incremento desde enero del año pasado. Por otro lado, la inflación subyacente, considerada una mejor medida de la evolución de los precios, fue del 4.21%, su nivel más bajo desde abril de 2021.
A pesar de estos datos positivos, la confianza empresarial mostró una tendencia negativa en mayo. El sector manufacturero registró una baja mensual de 0.4 puntos, el sector construcción disminuyó 2.1 puntos y el sector comercio bajó 0.6 puntos. En términos anuales, la confianza del sector construcción se redujo en 2.7 puntos y la del sector comercio en 2.4 puntos, mientras que el sector manufacturero subió 0.4 puntos, aunque con una clara tendencia a la baja desde enero de 2023.
El indicador de confianza del consumidor también tuvo un comportamiento negativo, disminuyendo 0.5 puntos en mayo. La mayor preocupación de los consumidores se centró en la situación económica del país, que comparada con la de hace 12 meses, bajó 1.1 puntos. Esta disminución resultó en un aumento anual de solo 2.0 puntos, el menor avance en los últimos doce meses.
Perspectivas Futuras
Especialistas privados y del gobierno coinciden en que la economía mexicana se desacelerará en los próximos años, con expectativas de crecimiento del 2.1%, una cifra significativamente inferior al promedio anual de los últimos 30 años. A pesar de los incrementos recientes en consumo e inversión, la incertidumbre económica a mediano y largo plazo sigue siendo una preocupación central para los agentes económicos.